El gobierno bonaerense echó a siete policías por día en lo que va de su gestión

Los exonerados suman 739 y se abrieron 1700 sumarios en Asuntos Internos; entre los expulsados figuran agentes acusados por casos de corrupción, homicidios, torturas, robos o inoperancia en la labor policial.

La primera medida de Ritondo, fue cambiar al jefe de la policía y nombrar a Juan Pablo Bressien lugar del comisario general Hugo Matzkin. La purga comenzó tras la triple fuga del penal deGeneral Alvear de Víctor Schillaci y los hermanos Martín y Cristian Lanatta, condenados por el triple crimen de Gral. Rodríguez.

Así, quedaron al descubierto las falencias de la fuerza y la falta de cooperación de algunos jefes policiales por lo que Ritondo pasó a retiro a siete comisarios sumado a sanciones por sus malas actuaciones de distintos uniformados como los policías que atropellaron y mataron con sus móviles policiales a tres civiles en el conurbano.

En la última presentación dirigida al Ejecutivo provincial, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) advirtió: "La participación de funcionarios policiales de todas las jerarquías en distintas redes de ilegalidad, incluido el narcotráfico, es un fenómeno estructural asociado a las lógicas de funcionamiento de la institución y no un problema individual de policías malos. No existe posibilidad de encarar una política seria contra el narcotráfico si no se avanza en una transformación profunda de las policías".

El robo en la casa del intendente platense, Julio Garro, en un barrio privado Gran Bell,  marcó un antes y un después. El único detenido es el subteniente Patricio Miguel Masana, que alquilaba una casa en el mismo country pero no pudo explicar cómo pagaba una renta mensual de 40.000 pesos y 8000 de expensas con su sueldo básico de policía.

Además se le secuestraron varias dosis de cocaína y de drogas de diseño, y se le incautaron planillas de horas adicionales de la policía bonaerense lo que derivó en una investigación paralela por el oscuro manejo y distribución de las horas.

Fueron apartados de sus cargos el jefe de la comisaría 1º de esta ciudad, comisario Marcelo Cifuentes, y su segundo, subcomisario Carlos Arias, sospechosos de haber participado en maniobras irregulares.

"La policía bonaerense es una fuerza violenta, desprofesionalizada y marcada por la corrupción estructural", se lee en el documento que el CELS le entregó a Vidal. Ritondoreconoció estos problemas y destacó que para  llevar adelante la reforma policial "no tendrá ningún problema en echar a todos los policías que sea necesario".

Fuente: La Nación