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Es oficial: la Provincia no adherirá al protocolo de uso de armas de fuego y apuesta por capacitar a la Bonaerense

A través de un comunicado, el Gobierno de María Eugenia Vidal dejó en claro que la Policía “tiene que tener todas las herramientas para hacer cumplir la ley”, pero consideraron que “no todas son iguales”.
La gobernadora María Eugenia Vidal se diferencia de Nación y apuesta por la capacitación de los policías bonaerenses
El Gobierno de María Eugenia Vidal no tiene por el momento pensado implementar el protocolo de uso de armas de fuego que habilitó el Ministerio de Seguridad de la Nación para las fuerzas federales. Así lo hicieron saber fuentes de la gobernación a través de un breve escrito que hicieron llegar a Primer Plano Online.

En el texto, la Provincia informó que, si bien está analizando la aplicación de esa flamante normativa en territorio bonaerense, priorizan otros argumentos para evitar por el momento su instrumentación. En rigor, desde el Ministerio de Seguridad explicaron que la Policía “tiene que tener todas las herramientas para hacer cumplir la ley”, aunque destacaron que “no todas las Policías son iguales”.

A continuación, el detalle completo de lo informado por gobernación:

Desde el Gobierno consideramos que el policía tiene que tener todas las herramientas para hacer cumplir la Ley pero no todas las policías son iguales. En este caso el Gobierno Nacional considera que debía unificar el criterio de acción de las fuerzas federales y por ello instrumenta este nuevo reglamento para el empleo de armas de fuego.

Nosotros creemos que es importante dar el debate y cuando sea el momento lo vamos a evaluar. Pero en el caso de la Provincia, desde el comienzo de la gestión, cuando encontramos una fuerza devastada, iniciamos un proceso de reforma profunda e integral prácticamente de cero, que nos encuentra hoy con una policía diferente.

Antes que redefinir su marco de actuación tenemos que culminar este camino. Cuando llegamos nos encontramos con muchos policías que nunca habían hecho una prueba de tiro y no tenían el equipamiento necesario para cuidarnos. Por eso reentrenamos a todo nuestro personal y realizamos más de 350 cursos de capacitación anuales, los equipamos con chalecos, camionetas blindadas y comunicación encriptada. Dijimos que nos importaba mucho más la calidad que la cantidad y lo estamos cumpliendo con una permanente profesionalización.

Y así como cuidamos y acompañamos al que tiene vocación de servicio, separamos al que hace las cosas mal. Hoy hay más de 11.500 policías que apartamos porque tenían connivencia con el delito y 750 que están presos.

En este marco creemos que ahora no es el momento, pretendemos seguir profundizando el camino que nos trazamos para tener una mejor Policía.

Fuente: Primer Plano

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